Un tarde distinta.. (Mio y Zero)

Era una tarde algo calurosa, aún así ciertas nubes rondaban el cielo , era un calor húmedo y molesto. Había decidido ir a la piscina entonces, ese lugar ciertamente estaría vacío.

Caminé por el borde de la piscina y luego me metí al agua, no me agradaba tirarme así que simplemente me dejé caer lentamente. La piscina no era muy profunda Idiota, eres muy alto Suspiré ante mis pensamientos y comencé a flotar relajándome.

No había experimentado mucha paz ultimamente, por ende, esto era muy relajante.

Calor...hacía mucho calor y yo estaba encerrada en la habitación del instituto con un pequeño ventilador que realmente no hacía mucho por mi. Decidí combatirlo con algo...así que no hice más que dirigirme a la piscina de la academia.

Me acerqué a esta, el olor a cloro y el aire frío que de algún modo traía al agua era relajante. Definitivamente yo ya estaba en traje de baño, puesto que hasta una simple remera era muy molesta y estaba segura de que me metería en el agua en algún momento.

Me acerqué al borde de la pileta y sonreí al divisar una figura bastante conocida para mi.

-Zero...-susurré con una pequeña sonrisa, llamando su atención -Hola- terminé mientras me sentaba en aquella escalinata pequeña que entraba en la piscina.

Me había llamado la atención una voz que había pronunciado mi nombre, alcé la vista y la ví allí. Tan bella como siempre.

Nadé hasta el borde de la piscina hasta donde ella estaba y apoyé los brazos y la cabeza allí para observarla lentamente como detallándola, le sonreí y luego decidí hablar - ¿Buscando matar el calor neh ? -le dije riendo un poco.

Sonreí al ver que se acercaba -Pues, si; está bastante pesado- dije moviendo mis pies en el agua fría, era relajante sentirlo -Tuvimos la misma idea- agregué riendo levemente.

-¡Si! -dije animado metiéndome de lleno bajo el agua de un golpe. Ella estaba con los pies colgando desde el borde de la piscina, fue entonces que una idea algo loca cruzó mi cabeza.

Aún desde bajo del agua tomé una de sus piernas y le jalé al agua haciendo que callera - Espero sepas nadar Mio! -grité alejándome tras haberla echado al agua.

Noté como Zero se metía en el agua y luego de un momento noté que yo era la que caía allí. Escuché lo que dijo el chico luego de jalar mis piernas para que cayera a la piscina, y ya sacando mi cabeza del agua reí -Claro que se nadar, baka- dije de un modo travieso, mientras me secaba la cara con las manos.

Miré al agua, al chico no le quedaba tan profundo, pero a mi me llegaba a los hombros. Sonreí -Eres alto, neh- dije como examinándolo, para luego ponerme como si estuviera de puntitas de pie y revolotear sus cabellos.

Reí cuando ella finalmente sacó su cabeza y me habló , solo quería molestarla- No lo se, quizás siendo una vampireza no supieras -le dije buscando molestar pero luego sentí como me alborotaba los cabellos poniendose de puntas para alcanzarme .

-Hmmm quizás si lo soy -dije y le tomé de la cintura alzándola - Y tú eres una enana -bromeé, seguramente se enojaría por andar molestándola

Sentí que me tomaba de la cintura y me alzaba, no pude evitar sonreir con ello puesto que al parecer hoy estaba de bromas -¡Oye! Parece que quieres guerra, ¿Verdad?- reí al decir eso, pues, tenía razón con el hecho de que yo fuera de esa altura -Hmmm, no te metas con mi adorable tamaño- bromeé con aires de orgullo como si fuera una niña pequeña, cruzando mis brazos...pensando en que podría decirle, pero no se me ocurría ninguna broma.

Enarqué una ceja sin quitar mis manos de su cintura, ¿adorable tamaño? Quien lo diría...

-Joo tenemos a una pequeña egocentrista aquí entonces- hablé besando ligeramente su frente- Y lo de la guerra , no lo se... tal vez solo me levante de buen humor hoy... -susurré y sonreí al final

Puse mis manos en los hombros del chico -Pues, debo defenderme de las bromas hacia mi altura- dije con una sonrisa para luego decidir molestar también -Pues, tal vez te levantaste de buen humor o...- pensé por un rato y luego reí -...simplemente el calor te vuelve payaso- recalqué la última palabra puesto que siempre me había causado gracia ello.

Le miré fijamente haciéndome pasar por ofendido , no era un buen actor pero esperaba que me creyese.

-No se si soy payaso, pero si... algunas veces el calor me hace mal -dije y luego me largué a reir -Así que no te sorprendas por mi comportamiento , puedo hacer cualquier cosa... -Sólo déjate llevar...

Le miré con una sonrisa y decidí seguir molestando.

-Aha, claro- dije con un pequeño tono sarcástico para luego reír -¿Cómo qué?- susurré con esa intención con la que él había comenzado. Reí internamente tratando de ver su reacción.

-No lo se... -susurré y la solté pues aún tenía mis manos en su cintura - Puedo hacer muchas cosas -me metí bajo el agua nuevamente nadando un poco hasta como a dos metros de distancia de ella.

-¿Esto?- hablé y le salpiqué agua para luego volver a meterme dejabo. Me iba a matar...

Noté como se metía bajo el agua para nadar y alejarse un poco. Salpicó agua hacia mi y no pude evitar soltar una risa ante eso. Imité su movimiento, y le salpiqué de forma graciosa.

-¿Eso es todo lo que sabes?- molesté para luego volver a salpicarle.

Cuando me salpicó el agua simplemente me volví a metar bajo esta y nadé para aparecer atrás de ella y abrazarla fuertemente.

-Cuando estoy contigo, puedo ser capaz de hacer muchas cosas -le dije al oido - Eres la fuerza que necesito para todo, eres la única cosa que quiero proteger ... - Ahora andarás de romántico ¿zero, quien te entiende? sonreí ante ese comentario de mi mente y esperé respuesta de ella.

Sentí su cálido abrazo por detrás y sonreí ampliamente al oír sus palabras. Me volteé quedando frente a él y puse mis manos y mi rostro en su pecho. Simplemente era la única persona con la que sentí el verdadero nombre de la felicidad.

-Eres lo mejor que me pasó en la vida- susurré sonriendo internamente.

-Si, así de grandioso soy -dije, No podía evitar hacerme pasar de payaso y me largué a reir llevando una mano a mi cabello.

-Lo siento lo siento, hasta ahí puede llegar el Zero romántico antes de ser interrumpido por el gracioso -comenté y luego besé su frente.

Reí al oir su comentario, no podía evitar sentirme atraída por aquella personalidad graciosa a su vez, que solo yo conocía.

-Yo no lo definiría como grandioso; más bien, eres mi centro de chistes- decidí seguir molestándolo así como el lo hacía y me separé un poco con una sonrisa -Vamos, di la verdad, no puedes enojarte con esta carita- dije en tono dulce señalando mi rostro.

Solté una carcajada, esto realmente parecía un dúo de payasos egocentristas.

Me hice el ofendido ante sus palabras y enarqué una ceja -No soy tú centro de chistes pequeña Mio! -dije simulando aún estar ofendido enfatizando la palabra "pequeña" para que se molestar pero luego no pude evitar largarme a reir.

-Ciertamente, no puedo enojarme contigo -suspiré derrotado. Era cierto - No es por tú rostro ni nada, simplemente no puedo porque eres tú -dije y sonreí .

Enarqué una ceja al oír sus palabras -¿Pequeña Mio?- dije cruzando mis brazos para luego reír al oír como se rendía ante lo que había dicho.

Sonreí dulcemente ante sus últimas palabras -Te gané- dije aún con esa sonrisa y caminé por el agua hasta llegar cerca de él.

- ¡Solo por esta vez! -dije y reí. Decidí que sería bueno salir de la piscina comenzaba a tener algo de apetito. Quizás sería bueno ir a comer algo.

Y una idea cruzo mi cabeza. Me senté en el borde la piscina y le hice una seña para que se acercara también y cuando lo hizo hablé -¿Quisiera usted bella dama concederme el honor de salir a comer conmigo? -un tono algo pícaro salió de mi boca tratando de sonar caballeroso a la vez.

Noté como salía de la piscina y se sentaba en el borde. Imité su movimiento y sonreí al oír su comentario. Realmente estar en la piscina y nadar traía apetito.

-Sería todo un honor para mi- sonreí y traté de sonar elegante pero no pude evitar reir luego y pararme para sacudirme un poco, suponía que debíamos cambiarnos antes, ambos estábamos empapados.

-Iré a cambiarme, te espero en la salida de la academia- me acerqué a ella y besé su mejilla -Trata de no dejarme plantado -dije riendo mientras iba corriendo a cambiarme. Sería interesante tener una especie de cita.

Sonreí al oirlo -Tranquilo, estaré allí- dije y me dirigí a uno de los cuartos, sería interesante y divertido esto. Se podría decir que era una cita.