Enferma ¿de amor? (kanade and sasuke)

Estaba en el hospital, pudriendome de aburrimiento. Si había algo que odiaba era el hospital y los dr seguramente lo había notado pues mi humor no era muy bueno cada vez que uno entraba a revisar las heridas que tenía.

Me tumbé con pereza en el colchón, no tan fuerte pues mi espalda era la de más heridas presentes y eso me molestaba en exceso. Tenía a un lado la comida que me había traido la enfermera pero no, no comería nada. Odiaba estar sola en ese lugar y estar tan aburrida.

Yo necesitaba salir, practicar con mi kuroyami ¡ALGO! cualquier cosa que me entretubiera no comida que ni sabor tenía.

Te comportas como una niña lo sbias oí a mi mente refunfuñar y yo suspiré.

Caminaba por los pasillos del hospital puesto que iba a ir a visitar a Kanade. Llegué a la puerta que tenía el número que me habían dado y la toqué; sin esperar el "Pase" entré con una sonrisa traviesa y un pequeño ramito de flores.

-Bueeeeenas, Kanade- dije con un tono alegre, notando que su humor no era tan bueno, y era de esperarse, estar allí sentada horas y horas debe ser aburrido.

Me acerqué a ella y me senté a su lado, esperando que dijera algo; le di las flores que eran de color blanco, puesto que ese color siempre me hacía recordar a ella que era como un ángel para mi..."Tenshi"

Lo que faltaba mi mente habló y yo la mandé callar. Sasuke había venido a visitarme, eso era en parte una forma de pasar el tiempo cosa que yo había pedido desde que me habia despertado ese día. Claro claro, el vampiro de quien te enamoraste, dios... suspiré , era mejor concentrarme en el pelinegro a mi frente que en las voces de mi cabeza.

-Sasuke, hola -dije en un suspiro largo, en cierta forma aún no me acostumbraba a ese tono tan infantil que usaba conmigo -Gracias , son hermosas -dije recibiendo las flores blancas que me había traido y aspirando su aroma.

-¿Cómo te encuentras?- dije cambiando mi tono, puesto que eso era lo único que realmente me importaba; vi la comida que estaba a su lado, intacta, no había comido nada -¿Te sientes mal aún?- completé al notar el último detalle, realmente estaba preocupado, aunque el médico me haya dicho que ella estaba bien, yo seguí pensando y retorciendo mi mente.

Noté como cambiaba su tono y posaba su mirar en la comida. Yo no comería nada de este hospital.

-Pues, puedo decir que he estado mucho mejor -le respondí lanzando un suspiro de fastidio ante todo - No me siento mal... por eso me quiero ir ¡ya! -reproché medio cruzando mis brazos.

Reí risueño cuando la oí decir que se quería ir, puesto que se estaba aburriendo mucho...si, al parecer estaba mejor -Tienes que mejorar al 1OO% antes de poder salir de aquí- dije en un intento de hablar profesional y seriamente -Yo se que es aburrido, pero piénsalo de otro modo; vas a ser mimada todo este tiempo a lo grande, sin tener que preocuparte de pelear o Kuroyami- terminé poniendo mi mano al lado de la suya.

Medité un poco lo que dije y saqué de mi mochila un obento con bolas de arroz dentro -No soy tan bueno cocinando ya que...soy un hombre- reí- Pero te conozco y se que no ibas a comer lo del hospital...así que hice esto- le mostré lo que estaba dentro de aquella cajita -Cómetelo o no recuperarás fuerza- le reproché al ver que miraba extrañada lo que yo había hecho con el poco arroz que había encontrado en la cocina del instituto.

Tomé gustosa las bolas de arroz que me ofrecía y llevé una a mi boca , eran deliciosas ciertamente entonces reí algo bajo recordando algunas cosas , o más exactamente yo intentando cocinar algo. Era pésima en ello. -Pues... estan deliciosas -le dije sonriendo quedamente- Algún día me enseñaras a cocinar -dije en broma, yo era un asco en la cocina.

Luego pensé un poco más sus palabras y una pregunta surcó mi mente - ¿Quién se supone que me va a mimar aquí? practicamente estoy el día entero aquí sola y sin hacer nada -dije llevando otro poco de arroz a mi boca.

Reí ante lo primero que dijo sobre las bolas de arróz y le miré orgulloso; luego escuché lo último que dijo y revoloteé sus cabellos -Pues...¿Para que crees que estoy aquí? Y con las bolas de arroz más deliciosas de la historia- terminé bromeando sobre la comida, puesto que no eran tan ricas como ella decía.

No pude evitar reir con lo que había dicho.

-Oh...¿viniste a mimarme entonces? -dije levantando una ceja levemente- Sabes... yo podría aprovecharme de eso -dije comiendo otro poco de las bolas de arroz- No se..

-¿Aprovecharte?- dije acercando mi rostro al suyo, como si estuviera poniéndola bajo presión -¿Cómo harás eso?- le miré y reí al notar su expresión, pero no me moví, quería que reaccionara, quería ¿Molestarla? puesto que esa forma de ser de ella, juguetona, malhumorada era una que estaba...escondida, pero estaba.

¿Con que quieres molestarme? me dije a mi misma luego de sorprenderme un poco por lo que habia hecho. Lo siento, este juego es de dos ... reí ante ese pensamiento y lo siguiente que hice , me lo iba a reclamar despues pero, si el molestaba, yo lo haría mejor.

-¿Qué tal así? -dije y lo agarré de la camisa cortando cualquier distancia entre nuestros rostros y besándolo de repente.

Sentí como me besaba de repente; me sorprendí demasiado, pero aún así correspodí a aquel beso que estaba esperando hacía rato. Cuando el aire faltó me separé un poco -¿Entonces así es la cosa?- dije en tono de pregunta para volverla a besar sopresivamente con más intensidad; realmente la quería mucho como para dejarla ir... Clan existente o no

Sonreí interiormente al sentir que me besaba otra vez, y obviamente las voces de mi cabeza no se hicieron esperar, pero por primera vez en mucho tiempo, las ignoré totalmente simplemente dejándome llevar por aquella sensación que ahora experimentaba. Llevé mis manos al cabello de Sasuke por un instante , mientras el beso duraba hasta que la dichosa falta de oxígeno se hizo presente.

-Supongo que así es -le dije, solo apartándome lo suficiente para mirarlo, y sin apartar mis manos de su cabello -

-Y yo me alegro de que así sea- susurré mirándola fijamente con una sonrisa, sin sacar mi vista de esos ojos que me habían atontado desde la primera vez; me accerqué a su oído -Te amo- susurré muy levemente, algo solo para ella.

Lo abracé , algo debil por que aún no recuperaba toda mi fuerta, pero abrazo al fin y también me acerqué a su oido.

-Yo también.... -le dije en un susurro, algo que solo el escucharía

Si claro, un vampiro, ¿crees que estaran juntos mucho tiempo? al oir ese pensamiento, me tensé. No me aparté de él , pero me tensé ante es solo y estúpido pensamiento.

Noté un mal pensamiento que vino a mi mente Ella es una cazadora, tu un vampiro, ¿Estás haciendo lo correcto? decía mi mente, a lo que yo respondía, No se, y ahora no me interesa...lo único que me interesaba ahora es que ella fuera feliz, haría lo que fuese para que ello pase.

Correspondí levemente y sin lastimarla a aquel dulce abrazo, y no me separé de ella, acaricié sus cabellos y seguí en esa posicion.

Sentí como acariciaba mi cabello y cerré mis ojos disfrutando de aquello, pero las voces de mi cabeza no me dajaban a gusto.

-Sasuke... -susurré levemente sin apartarme- ¿Esto es correcto?... -pregunté aún con los ojos cerrados, quería saber que pensaba él.

Escuché lo que dijo Kanade y medité un rato, todo era tan hermoso, tan relajante que se me impedía pensar en todo lo malo que podría pasar...podía ser egoísta pero no iba a dejar que nada me separe de Kanade y le haga daño.

-La verdad...que no lo se- susurré sin apartarme de mi posición -Solo quiero tenerte a mi lado...te protegeré de todo lo que intente impedirlo- agregué seguro, puesto que pase lo que pase yo la protegería a cuestas de todo.

-Los cazadores vendran a por nosotros-le dije en un susurro pesado apartandome levemente solo para mirar su rostro - Esto... esto es imposible -dije y bajé el mirar. -No quiero apartarme de tí...

Noté como ella se apartaba de mi, yo la miré a los ojos y escuché sus palabras, realmente lo que pasara no importara mientras ellas esté bien.

-Vendrán por nosotros...- le miré a los ojos y mis sentimientos salieron a flote -Pero, aún así estaremos juntos...prefiero vivier 1 día contigo que a vivir 1OO años sin tí- terminé levantándo el mirar -Soy un egoísta, pero así lo pienso- sonreí dulcemente y le acaricié el rostro.

Sonreí instantáneamente al oirlo y más al sentir que acaraciaba mi rostro -Pues, eres mi vampiro egoista -dije riendo dulcemente por un momento.

Todo esto era tan perfecto, que era algo difícil de creer. Pero no durará... y he ahí mis conclusiones negativas, pero .. eran tan ciertas.

Entonces me dejé caer pesado en la cama. ¿Por que todo tenía un pero en toda historia?

No me sorprendería que alguien de la asociación entraba ahora mismo por esa puerta y me llevaba presa por la muerte de mi abuelo. O que apresaran a Sasuke por corromper a una cazadora.

-¿Estás preocupada, verdad?- susurré mirándole a los ojos que denotaban su preocupación detrás de la felicidad...pues yo sentía lo mismo. Me acerqué a ella -Estará todo bien...yo te protegeré- concluí susurrando y me senté justo a su lado nuevamente en la posición que estaba antes, jugando con uno de sus mechones de cabello.

-Ja... ¿no será al revés? -bromeé al oir lo de protegerme, haciendo un leve toque de superioridad que me caracterizaba.

Pero entre todo ese momento perfecto, alguien tocó a la puerta y yo me tensé al ver quien era. Era nada menos que Yuki Akitawa, uno de los más prestigiosos cazadores del gremio. Me tensé.

-¿Okada Kanade ? -preguntó y luego una mueca de asco se formó en su rostro al ver al vampiro junto a mi.

Al ver que uno de los tipos del gremio que yo conocía bien entraba, yo me tensé al igual que Kanade -¿Qué desea?- pregunté con arrogancia al ver que me miraba con asco.

-Es a ella, no a tí, vampiro- resaltó la última palabra y yo me paré, me adelanté un poco...previniendo la situación -Al parecer es cierto lo que dice los rumores- siguió -Mataste a tu abuelo- agregó, juegos mentales, típico. Me enfurecí -¡Él fue quién quiso matarla!- protesté, pero fui interrumpido rápidamente -¡TU CALLATE!- me sobresalté al oir semejante grito

-Si, lo maté -dije fuerte y claro al oirlo hablar, Yuki Akitawa era alguien bastante intimidador, pero no llegaba ni a los talones a los juegos mentales que me habían hecho pasar durante mi entrenamiento en mi clan. -No pueden hacer nada en mi contra, ni en contra del otro cazador involucrado, simplemente diré que quice reclamar mi puesto como lider del clan -amenacé

En el clan , una antigua regla decia que un duelo a muerte podía ser pedido por el que hubiera sido entrenado para futuro lider del clan, yo solo usaría esa regla a mi favor.

-Pero, no fue el filo de tu arma quien lo mató - Touche -Fue otro cazador ¿que tienes para defenderte? -cuestionó y yo me quedé en blanco mirando a sasuke y al pelinegro alternadamente.